Gracias a todos los que nos habéis seguido en este viaje y en especial a los que habéis participado en este blog, vuestros comentarios nos han permitido mantenernos informados y nos dieron muchos ánimos para llevar a buen puerto esta aventura. Agradezco también a mis compañeros de viaje la agradable compañía y tranquilidad que hemos tenido, incluso en los momentos delicados provocados por las continuas roturas del material y el estado precario del mantenimiento del barco que puntualmente provocaron momentos de ánimo más decaído.
Mis compañeros han sido perfectos para llevar este viaje adelante, y aun cuando algunos no nos conocíamos entre nosotros, sin duda esto ha sido el inicio de una buena amistad. Pilar, Juanjo, Reiner, Ana y Fernando con los que compartí la etapa desde Canarias a Martinica han sido un ejemplo de cómo se puede convivir en grupo de manera ejemplar en pocos metros cuadrados y durante un periodo de tiempo prolongado. (Que aprendan los de Gran Hermano). Quiero mencionar a Javier que participo en la bajada a Canarias, y que desgraciadamente a última hora no pudo por obligaciones personales unirse al grupo en la etapa atlántica, pero que nos dio buenos consejos y siempre nos animo en este proyecto.
A nivel personal deciros que ha sido una experiencia muy gratificante, no ya en su parte lúdica, pues esta travesía de 4,000 millas se hace realmente pesada y más en su parte final, pero si por lo que tiene de reto personal llevar a adelante un proyecto como este. También ha sido gratificante en lo relativo a la navegación, y el aprendizaje que esta travesía me ha supuesto, bien fuera por las circunstancias propias del viaje , como de los conocimientos que he ido adquiriendo del resto de la tripulación, de cada uno en su materia. Lo peor sin duda han sido las incidencias del barco, rotura del pulpito de proa, driza del Génova, escota y polea de la mayor rotas, rajadura de mayor y genaker, ruidos en los mamparos del barco, la blue no funciono nunca, los stopers deteriorados dejaban bajar las drizas 1 metro una vez cerrados obligándonos a condenar los winches; estos y otros asuntos menores nos mantuvieron preocupados de roturas mayores durante todo el viaje.
En referencia al viaje, la parte más dura y divertida fue la bajada a Canarias con 30 nudos de viento y mar de 5 metros. De Canarias hasta el través de cabo verde fue una travesía movida también con 20 – 25 nudos constantes, y a partir de ahí fue mucho más tranquilo, siendo la preocupación más por el estado del barco y las roturas que por el estado del mar.
El barco se queda en Martinica. En primavera si el barco se recupera de sus achaques lo llevara parte del equipo hasta azores, en donde espero poder volver a incorporarme para hacer la última etapa hasta la península. El blog lo intentaremos tener actualizado durante todo este tiempo.
Un Saludo a todos los navegantes.
Julio
Querido Julio y demás compañeros;
ResponderEliminarMe alegra leer que por fin habéis llegado a buen puerto y que no ha pasado nada más que lo previsible: roturas, roturas y más roturas…
Enhorabuena por la experiencia, por los amigos ganados, por los amaneceres, por los atardeceres y su poesía romántica, por la pesca, por el mar y el viento de los que habéis disfrutado y que tan bien habéis compartido con todos nosotros.
Seguro que a pesar de todas las incomodidades y de la ansiedad que en más de un momento habréis pasado, tarde o temprano el recuerdo se convertirá en nostalgia y en deseo de volver a encerraros en ese u otro cascarón para repetir la aventura. ¡Ojo!, que el mar engancha. La libertad es una droga dura.
Os deseo unas felices navidades a todos, a tripulantes y a seguirdores del blog. Seguiremos soñando con el mar.
Abrazos a todos!.
Poco queda por añadir tras la nota de Pepe. Disfrutad de la tranquilidad y la libertad del Madrid consumista prenavideño.
ResponderEliminarFeliz Navidad y mis mejores deseos para 2010
Bienvenidos a Tierra!!! Suscribo las palabras de Pepe y os deseo felices y terrestres fiestas allá donde estéis cada uno.
ResponderEliminarUn abrazo especial a las chicas!
María y Marta
Enhorabuena!!! que fotos tan bonitas. Mucho tiempo de reflexión ahí y ahora.
ResponderEliminarA valorar esas pequeñas cosas de las que no nos damos cuenta.
Bienvenidos a tierra.